Homenaje a Nicolás Bustamante en el campamento de Villamiel

(Campamento de Villamiel, año 1989)

Durante el fin de semana del 20 al 22 de mayo del año 2022, un grupo de personas se reunió en las instalaciones propiedad de Cáritas Diocesana en el pueblo de Villamiel. El objetivo fue homenajear a Nicolás Bustamante, ya fallecido, y a su esposa Pura Rangel.

Varias generaciones de jóvenes han pasado por estas instalaciones del campamento de Villamiel, siendo Nicolás jefe de campamento junto a su esposa Puri. De ellos, surge este homenaje.

«Hemos elegido este mismo escenario donde Nicolás y Puri nos enseñaron un poquito sobre lo que es la fe en Cristo y donde, además, pudimos adquirir vivencias personales que forjaron nuestro carácter dentro de la Iglesia, cada uno en el modo en que Dios nos concedió. Ellos ayudaron también a estas generaciones de jóvenes compartiendo el día a día, disfrutando de la amistad y el cariño mutuos y encontrando respuestas a las inquietudes propias de cualquier adolescente», explican en una carta firmada por José Antonio Vivas Ordiales.

El domingo 22 se celebró una eucaristía para pedir por el alma de Nicolás y agradecer la presencia de Puri junto con un grupo de acampado.  “Ha sido muy emotiva”, apostilla Vivas. Se pidió también por quienes, queriendo estar, no pudieron asistir a esa eucaristía que estuvo celebrada por D. Julián Carlos Pérez, párroco de San Ignacio en Coria, sacerdote que colabora y que conoció el campamento siendo seminarista.

(En la imagen, Nicolás Bustamante y Puri Rangel)

Si en algo coinciden la mayoría de los acampados, es en valorar la dedicación de Nicolás y Puri y las grandes amistades forjadas que se mantuvieron después de muchos años a pesar de la distancia por ser de distintos pueblos.

Los campamentos comenzaron en Villamiel en 1989, «muchos de nosotros ya vivimos estos mismos campamentos en Cadalso de Gata”, añade José Antonio Vivas Ordiales. «Tanto en un sitio como en el otro, asistía una cantera de jóvenes que veníamos de las parroquias de nuestros pueblos, por este motivo se les llamaba también campamentos de jóvenes cristianos, donde se daba una transmisión de la fe la cual, sin duda, nos ha ayudado y nos sigue ayudando en nuestras vidas», sentencia. «Es de justicia poder agradecer a Dios que pusiera en nuestro camino a Nicolás y Puri. Nicolás, esperamos que, desde el cielo, sigas rezando por nosotros»