Otilia: «Los laicos han ido configurando mi vida religiosa»

20120427-otilia

Me considero una mujer de relación y de muchos amigos. Más de media vida me la he pasado en pueblos o en barrios. Nací en Lebrija, pueblo de Sevilla. Andaluza, pero siempre he dicho que la «patria de mi espíritu» era Canarias. 17 años estuve en las islas. Fui joven y volví vieja, pero bendita vida que dejé allí. Un buen amigo cura me ofreció pasar una Semana Santa con una familia aparcera en las cuarterías – chabolas hacinadas, sin ventanas, luz ni servicios, que tenían como viviendas los aparceros que plantaban y recogían los tomates. Acepté. Convivía como una más de la familia: trabajábamos y preparábamos las Celebraciones. Ante mí se abrió un mundo de pobreza, explotación e injusticias que desconocía. En nuestro colegio estábamos educando a los hijos de estos Empresarios que toleraban estas viviendas infrahumanas para sus trabajadores. Aquel curso tuve que continuar en el colegio, compartía con mis alumnas -aún no teníamos alumnos mi asombro por lo vivido, las llevé al lugar… me animaron a dejar el colegio- «aquí te reemplazan fácilmente, allí no»- Me fui a un colegio público en un pueblo pequeño cercano a la zona turística hotelera.

Aquí empieza mi gran etapa de discípula de aquellas gentes. Yo que soy torpe para comprender la Biblia, sus vidas eran mi Evangelio. Aprendí el gusto por lo sencillo, por lo que sale del corazón, sin apariencias; el valor del tiempo -¡ay! mis prisas, el valor de la persona, la acogida, cuando llegabas a una casa eras lo principal, me enseñaron a estar entre ellos. Tuve que operarme en esa fecha, teníamos un seguro las religiosas. Con ese falso orgullo de «perfección» del principiante, dije que iba a la Seguridad Social, como ellos. Le pregunté a mis maestros. – «No, Otilia; nosotros cuando se trata de la salud, si tenemos que endeudarnos, nos endeudamos, con la salud no se juega«.- Saben distinguir lo esencial de lo que no lo es.

En otra ocasión hice unos Ejercicios Espirituales con un grupo de matrimonios, militantes creyentes de Asamblea Canaria: laicos y laicas comprometidos y disponibles para la vida pública. Decían del cura: «No aterrizaba… pero cuando empezó a aterrizar, el Aeropuerto de Gando se hizo chico». Nos decían: «A nosotros nos hace falta rezar más, a vosotras compromiso«. Este grupo, cuando tenían un hijo esperaban a la Vigilia Pascual para bautizarlos; la comunidad expresaba su compromiso con los nuevos bautizados. ¡Esto era la celebración de un bautismo! Para mí fue de verdad enriquecedor la relación, el trabajo y la amistad con este grupo.

Mi primer Noviciado lo hice en Madrid, por los años 60. El carisma de la Congregación: «MANIFESTAR EL AMOR DE DIOS ALLí DONDE ESTEMOS». Allí me dieron los fundamentos, los pilares de mi Vida religiosa: Seguimiento de Jesús, amor a su Madre, oración, contemplación… En Canarias con tantos laicos y laicas, como formadores, hice mi 2º Noviciado. Me ayudaron a poner en práctica el carisma: «CóMO IR MANIFESTANDO EL AMOR DE DIOS» en aquellos pueblos y lugares a donde me ha enviado la Congregación.

Así, a pesar de mis debilidades y mi pecado, sostenida por la Fidelidad de Dios, el cariño de mis hermanas religiosas y de tantos laicos y laicas, he podido llegar a Celebrar mis Bodas de Oro de consagración religiosa en Montehermoso, mi último destino… y ¡ojalá por muchos años!

-En el año del laico, le hemos pedido a Otilia que nos dé su testimonio. En la foto se la ve entre voluntarios laicos de Cáritas Coria-Cáceres aprendiendo nuevos bailes. «Hay que estar al día» y por eso hasta está en Facebook

Quizás te pueda interesar

Homenaje de la Asociación de la familia Vicenciana a Nati

Natividad Quintana Toledano (Nati) recibió un homenaje el 26 de mayo en el Centro Pastoral Sagrado Corazón…

Procesión del Corpus en Cáceres

El 11 de junio en la concatedral de Santa María tendrá lugar la misa Solemne a las…

La caridad en el círculo del Silencio

El jueves 8 de junio, con motivo del Corpus y el Día de la Caridad se celebra…

Scroll al inicio