Una vigilia joven a la inmaculada llena de agradecimiento

El 7 de diciembre la pastoral juvenil vivió una oración muy especial con los jóvenes de nuestra Diócesis.

“En Adviento nada mejor que ponerse en manos de María Inmaculada para preparar nuestros caminos, para abrirle de verdad nuestro corazón al Señor que viene”, explica Castillo Abad, delegada de juventud.

Una celebración que presidió nuestro Obispo. “Con sus palabras alentó a los jóvenes a seguir adelante: «El Evangelio es de los jóvenes, María y Jesús eran jóvenes» y los animó a participar en la próxima JMJ de Lisboa”, apostilla Abad.

Los presentes conocieron el testimonio de tres jóvenes: Jara con “la fe en Dios, su Sí”, Dani, del seminario mayor sobre la vocación y el servicio y Mónica, la lucha y el amor de una madre que ha perdido hace unos días a su hijo de 16 años.

Para la delegada fue una jornada de auténtico agradecimiento: “Gracias especialmente a todos los Jóvenes que prepararon con mimo la vigilia y a quienes le dijeron Sí a Dios, son el presente de nuestra Iglesia. Gracias a Don Jesús por acompañarnos. Gracias a la Pastoral Universitaria, al Seminario y al grupo de Hakuna por su colaboración y a los sacerdotes que nos acompañaron. Gracias a Guadalupe, Isabel e Inés por prepararnos un rico chocolate. Seguimos caminando con María en este curso, para llegar a nuestra meta, la JMJ de Lisboa”.